La memoria debe ser generosa y empatizar con el sufrimiento de otros, contribuyendo a superar las diferencias entre los hombres, reconociendo al antiguo oponente como persona, lo que no significa que haya que ocultar nada, ni hacer bandería alguna, ni mucho menos defender totalitarismos, porque los materiales de investigación que nos ofrece la microhistoria, si son buenos, son imperecederos. Entre las fotos que hizo Jose Pablo Perez Gutierrez durante el rodaje del año pasado de nuestro documental hay unas cuantas que han sido posible gracias a la colaboración de nuestros amigos Koji y Yuki Casado Yamashita, que compusieron dos excelentes personajes de soldados japoneses en Iwo Jima, vestidos y equipados con prendas de la colección particular de un grande, Marcos Ríos, buena parte de ellas originales. Todo un lujo para una producción como esta, que parte de la voluntad de la gente para divulgar historias desconocidas hasta ahora y que gracias a estas imágenes, que nos recuerdan a "Cartas desde Iwo Jima" de Clint Eastwood, pueden llegar a un público más amplio.