Las biografías que entresacamos con gran esfuerzo de la historia familiar en el Fighting Basques Project para ofrecérselas a nuestros lectores y amigos y a un público deseoso de conocer la participación de una generación entera en el esfuerzo bélico de los países aliados durante la Segunda Guerra Mundial tiene en el puñado de niños de la guerra que lucharon con los británicos unas características muy especiales para nosotros, de alta carga emocional, por cuanto marcharon del país en 1937 en condiciones de gran penosidad, con las tropas franquistas llamando a las puertas de un Bilbao que ya estaba sentenciado por la rotura de los frentes y una población civil que ya había conocido un primer exilio interior procedente de Gipuzkoa, y aún conocería otro peor, y de más alcance y penosidad si cabe, que cambiaría para siempre la vida de miles de personas. En 1940, de 4.000 niños y niñas solo quedaban en Inglaterra, alojados en diferentes casas particulares con familias británicas, un total de 600 que no habían sido reclamados por sus padres por diversas causas que son fáciles de entender teniendo en cuenta la situación en la que habían quedado numerosas familias tras la Guerra Civil. Uno de ellos era José María Irala, nacido en Bilbao y domiciliado en Getxo, que había llegado al país junto a su hermano Rafael. José María se incorporó al Ejército británico en 1943 y en 1944 se incorporó a una unidad muy especial, el 1º Escuadrón de Reconocimiento Aerotransportado de Freddy Gough, con el que lucharía, a bordo de sus jeeps armados con ametralladoras Vickers, en Holanda durante la operación Market Garden, siendo la única persona procedente de este país que luchó con las fuerzas aerotransportadas británicas en aquella operación llamada, pretenciosamente, a terminar la guerra en Europa para Navidad, sin que nadie haga referencia a su memoria en ninguna de las diferentes publicaciones y entradas que hemos leído u oído en este aniversario, cuando ya han pasado dos años de la publicación de nuestro libro sobre combatientes vascos en la Segunda Guerra Mundial y apenas unos meses del artículo que le hemos dedicado en el blog de Desperta Ferro Ediciones. Irala, que falleció en combate con el Recce cuando un blindado alemán irrumpió en el interior del dispositivo británico, se sumaría a otro paracaidista vasco que falleció en combate con los británicos en Normandía (Lucio Sauquillo, de la 6ª División Aerotransportada) y a Justo Balerdi, "para" del 2º SAS que cayó igualmente en acción de guerra en el norte de Italia. Desde Sancho de Beurko seguiremos promoviendo una memoria democrática generosa y común, como hemos venido destacando estos días con la publicación del artículo sobre los emigrantes españoles que se incorporaron al Ejército norteamericano. Anunciaros que en breve publicaremos un artículo con la escenografía que hemos realizado en homenaje a Sauquillo. De mientras, invitaros a leer este como mejor modo de homenajear a una generación desconocida que desde nuestros modestos recursos luchamos por dar a conocer.
Leer artículo en Desperta Ferro: https://www.despertaferro-ediciones.com/2020/jose-maria-irala-un-nino-de-la-guerra-en-la-operacion-market-garden/