En estas imágenes que compartimos hay una propuesta escénica, la de los grupos de recreación Primera Linea. y Sancho de Beurko (unos brigadistas comiendo unas albóndigas en el Jarama), y tres imágenes reales en blanco y negro correspondientes a diferentes frentes y bandos de la Guerra Civil. Todas ellas nos cuentan historias que pasan por las perolas de grandes dimensiones con las que se alimentaba a los combatientes en el frente, perolos que se cocinaban allí mismo o en la inmediata retaguardia y luego se trasladaban a mano, lo que no siempre se podía hacer por razones obvias, incluyendo el riesgo de llevarse un morterazo. Si se cocinaba o se fumaba se delataba la presencia, pero cuando llevas tanto tiempo metido en un agujero lo importante era saciar el hambre y lo demás, incluso eso de perder la vida, se torna secundario. Y a eso se dedicaban con imaginación los encargados de la manduca: el "tupí", ese queso catalán que se mezclaba con cualquier tipo de alcohol (como por ejemplo el “saltaparapetos”), proporcionaba a la mañana las calorías necesarias para pasar el día. Por otra parte, en los perolos entraba cualquier cosa y podemos imaginarnos al calor de la lumbre esos cocidos que no eran más que la olla podrida de siempre. Os proponemos hoy un ejercicio de "masterchef" Guerra Civil ¿Sabríais decirnos de qué bando y de qué frente son estas tres fotografías de la Biblioteca Nacional? ¿Cúal de las imágenes corresponde al “tupí”? Por cierto, las fotos de recreación son de nuestro admirado Valischka.