El soldado Roy John Bilbao nació en 1923 en Lassen (California) y era hijo de Juan Bilbao y la vascocaliforniana Christine Alsago. Muy pronto la familia se movió a Reno (Nevada) y el joven Roy estudió en Northside Junior High School, pero en 1940 se trasladaron a Portland (Oregon). Tras estudiar dos años en la universidad, fue reclutado el 10 de enero de 1943 y enviado al 115º Regimiento de la 29ª División de Infantería, con la que desembarcó el Día D en la sangrienta playa "Omaha". Tras luchar en Saint Lo y Brest, su unidad llegó a la frontera alemana en Birgden-Kreuzrath, cruzando el Rin el 22 de marzo de 1945. Al final de la guerra en Europa el 115º Regimiento de Infantería se encontraba en Bremen, donde permaneció como fuerza de ocupación hasta el 16 de enero de 1946, cuando toda la unidad embarcó en el transporte de tropas “John Ericsson” de regreso a los EEUU, pero Roy no llegaría nunca al puerto de Nueva York con el resto de compañeros, ya que cayó por la borda durante el viaje y su cuerpo no fue recuperado. Un triste final para un muchacho que sorteó mil peligros y penalidades, convirtiéndose en la última baja vasca de la Segunda Guerra Mundial. Está memorializado en el Cementerio Norteamericano de Holanda en Margraten y su biografía es una de las noventa que han sido realizadas por la Asociación Sancho de Beurko para la exposición que se celebrará el mes que viene en el Basque Museum & Cultural Center.
Foto, www.findagrave.com.