Nos encanta este artículo absolutamente desmitificador publicado en el blog de nuestra editorial favorita Desperta Ferro Ediciones, que nos enlaza con la verdadera situación de los dos ejércitos que debían enfrentarse en una proyectada invasión alemana de las islas británicas, ya que no estaba al alcance real de los alemanes por varios motivos, empezando por la aplastante superioridad de la Royal Navy, pero sobre todo por esa concepción de una Luftwaffe que había desarrollado su doctrina con las enseñanzas (añadimos nosotros) extraídas de la Guerra Civil Española, donde se corrigieron los defectos de su maquinaria en condiciones de absoluta superioridad desde el comienzo de la campaña vasca del 31 de marzo de 1937, hasta el punto de que era una fuerza de nivel táctico y operacional, como dice el autor, Fernando Quesada, para conseguir la victoria en las operaciones de combate y abrir las brechas para la infantería y los carros, pero no para asegurar una superioridad aérea sobre la RAF, que es lo que se le demandaba cuando comenzó la batalla de Inglaterra. Esa RAF que era ya un enemigo formidable que fiaba su suerte no solo a los estilizados "Spifires", sino al más modesto "Hurricane", más oscurecido por la propaganda. Ese mito de "los pocos" contra los muchos (hijo de un maestro de la oratoria como Churchill), en el que también participaron aviadores australianos, canadienses, neozelandeses, sudafricanos, franceses libres, checos y polacos.
Leer artículo en Desperta Ferro: https://www.despertaferro-ediciones.com/2020/nosotros-solos-alemania-nazi-no-podia-ganar-la-batalla-de-inglaterra
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